Voy a abrir un nuevo negocio. ¿Debo alquilar o comprar un vehículo?
El lanzamiento de un nuevo negocio es un momento emocionante, pero hay que tomar muchas decisiones que pueden hacer las cosas un poco más estresantes. Decidir si alquilar o comprar un vehículo o vehículos de empresa es uno de esos dilemas.
En este artículo analizamos las ventajas y desventajas tanto del leasing como de la compra.
¿Arrendar o comprar?
Comprar un vehículo de empresa
El inconveniente más evidente de la compra de un vehículo es que puede resultar cara. Por lo general, tendrá que disponer del dinero necesario para comprar el vehículo por adelantado o pedir algún tipo de préstamo para financiarlo. Cuando se lanza un nuevo negocio, es probable que tenga muchos otros gastos, por lo que es posible que su presupuesto no alcance para comprar un vehículo directamente.
También debes tener en cuenta que el valor de un vehículo empieza a depreciarse en el momento en que lo sacas de la estación de servicio, por lo que no recuperarás el coste total (o casi) del vehículo cuando lo vendas. La AA calcula que al final del primer año, el vehículo habrá perdido el 40% de su valor original. No olvides que también tendrás que pagar las reparaciones que pueda necesitar el vehículo.
Por supuesto, comprar un vehículo tiene sus ventajas. Aunque, como se ha mencionado, el vehículo se depreciará, sigue siendo tuyo y podrás venderlo si tú o tu empresa necesitáis una rápida inyección de dinero.
Como el vehículo es tuyo, puedes hacer lo que quieras con él en cuanto a su aspecto. Esto será especialmente útil si quiere ponerle el nombre de su empresa, el logotipo, la dirección, etc. También es útil si necesitas modificar el vehículo para adaptarlo a las necesidades de tu negocio, por ejemplo, instalando en la parte trasera un espacio especial para guardar las herramientas y el equipo de tu empresa.
Otra ventaja potencial es que puede reclamar el coste del vehículo contra su factura del impuesto sobre la renta como una deducción de capital; debería hablar con su contable al respecto.
Arrendamiento de un vehículo de empresa
A diferencia de lo que ocurre con la compra de un vehículo, cuando alquilas no necesitas disponer de una gran cantidad de dinero por adelantado. Por lo general, todo lo que necesita es un depósito y luego pagará el resto a lo largo de la vida del contrato.
El leasing o el alquiler de un vehículo también significa que los costes de mantenimiento del vehículo suelen estar cubiertos; si el vehículo se estropea o necesita reparaciones costosas, esos costes corren a cargo de la empresa de leasing o de alquiler y usted no se verá afectado por facturas elevadas.
Es posible que incluso puedas comprar el coche o la furgoneta en algún momento, en caso de que tus circunstancias cambien y quieras hacerte con la propiedad del vehículo: pregunta si la empresa de leasing ofrece un contrato de alquiler con opción a compra.
Tanto si opta por el arrendamiento, el alquiler o la compra, le deseamos todo lo mejor con su nuevo negocio.